Según el Índice de Tetra Pak 2023, los consumidores están teniendo en cuenta activamente tanto el medioambiente como su salud individual a la hora de comprar alimentos. Estos consumidores con conciencia ambiental, denominados "climatarianos", están dispuestos a modificar sus hábitos alimentarios para proteger el planeta.
El mercado de alimentos saludables ya se ha consolidado, dado que los consumidores buscan activamente productos que tengan un impacto positivo en su bienestar físico. Sin embargo, una mayoría significativa está adoptando una visión más holística: el 70% afirma que los productos saludables no deben dañar el medioambiente, mientras que un 54% está dispuesto a hacerse responsable por el planeta y cambiar su dieta para contribuir con un mundo mejor.
La investigación, que se llevó a cabo en colaboración con Ipsos y constó de 5.000 entrevistas en línea realizadas en los 10 países (Brasil, China, Alemania, India, Kenia, Sudáfrica, Corea del Sur, España, Reino Unido y Estados Unidos) también revela que la conveniencia ya no es lo más importante.
En un marcado cambio de actitud, el 70% sacrificaría la conveniencia por productos más sanos. El afán por la salud tampoco se ve afectado por la crisis del costo de vida: solo el 17% está dispuesto a sacrificar alimentos y bebidas beneficiosos para la salud en la actual coyuntura económica.
Se espera que la tendencia climatariana aumente a medida que los efectos del cambio climático se dejen sentir de forma más generalizada, y los consumidores esperan que los fabricantes de alimentos ofrezcan productos saludables y sostenibles.
Adolfo Orive, presidente y CEO de Tetra Pak, comenta: "Los resultados del Índice de este año reflejan la dirección que hemos tomado en los últimos años con el fin de descarbonizar la industria alimentaria y hacer que los sistemas alimentarios sean más resilientes y sostenibles.
Las innovaciones alimentarias pueden desempeñar un papel fundamental a la hora de ofrecer productos no solo sabrosos, sino también eficientes desde el punto de vista de los recursos.
La buena noticia es que los consumidores están dispuestos a adoptar innovaciones que mejoren nuestra forma de vivir y comer, y el 62% cree que la tecnología tiene un rol en un futuro más sostenible. Al mismo tiempo, algunos consumidores temen que estas innovaciones no sean tan naturales como los alimentos frescos y no procesados, por lo que será fundamental encontrar el equilibrio adecuado.
"Este ámbito se está desarrollando con bastante rapidez, y es difícil predecir cuándo y hasta qué punto tendrá éxito; pero solo mediante esfuerzos continuados y aprovechando la colaboración para explorar todas las oportunidades potenciales, encontraremos soluciones a los desafíos actuales del sistema alimentario", afirma Adolfo.