Definida por la Política Nacional de Residuos Sólidos (PNRS) como un "instrumento de desarrollo económico y social caracterizado por un conjunto de acciones, procedimientos y medios destinados a posibilitar la recolección y devolución de los residuos sólidos al sector empresarial, para su reutilización, en su ciclo o en otros ciclos productivos, u otro destino final ambientalmente apropiado”, la logística inversa es una estrategia fundamental para Paraibuna Embalagens.
Además de los aspectos sociales, ambientales y económicos involucrados, su práctica fortalece las relaciones con los clientes, lo que maximiza el juego ganar-ganar y contribuye a una creciente fidelización en las actividades comerciales.
“Nuestro camión entrega productos terminados y los devolvemos cargados con las virutas que son nuestra materia prima en la producción de papel. Es una práctica muy antigua, pero que ahora se está expandiendo en las empresas y en los medios de comunicación. Para darle más sustancia a esto, hemos podido comprar materias primas de nuestros propios clientes”, explica la directora de Suministros e Instalaciones de Paraibuna Embalagens, Denise Peter.
“Esto también ayuda en nuestro proceso productivo, porque tenemos el retorno de una materia prima que producimos nosotros mismos y, por tanto, de primera calidad”, asegura.
De la preproducción a la posventa
El círculo virtuoso del reciclaje que comienza con la adquisición de desechos a los recolectores de reciclaje (que genera ingresos para una población más vulnerable) y continua después de la venta.
“Un cliente compra, por ejemplo, láminas de cartón para fabricar embalajes. Al procesar la caja queda lo que llamamos chatarra. Este material nos sirve de materia prima, porque vamos a volver a hacer papel con este cartón que ya se utilizó”, añade la Directora.
Si antes la logística inversa estaba más directamente asociada a la reducción de costes, ahora también se percibe como una estrategia que aporta valor a la actividad comercial.
“Estamos trabajando más estrechamente con el equipo de ventas que está atento a los residuos de nuestros clientes. Esta visión fortalece nuestra asociación con ellos, buscando juntos una solución para la disposición final, como lo exige la Política Nacional de Residuos Sólidos”, estima el contador de Paraibuna Embalagens, José Antonio Silva Oliveira.
A su criterio, el mercado también es más exigente con relación a las prácticas de producción sostenible.
La importancia de adoptar acciones y medidas para aumentar el porcentaje de reciclaje en Brasil se evidencia en datos recientes de la encuesta Datafolha, que revelan que, a pesar de que el 99% de los brasileños considera importante la recolección selectiva, el país recicla sólo el 4% de los residuos sólidos con esta posibilidad real.
Esta baja tasa demuestra la urgente necesidad de iniciativas de concientización y prácticas efectivas de logística inversa para aumentar la tasa de reciclaje.
Al ampliar la práctica de la logística inversa, empresas como Paraibuna Embalagens no sólo reducen costos, sino que también contribuyen significativamente a la sostenibilidad ambiental, generando beneficios económicos y sociales para toda la cadena productiva.
Asociación exitosa
“Paraibuna, además de ser un gran socio en el envío de láminas de cartón, nuestra principal materia prima, también lo es en el retiro del material enviado a logística inversa. Cada semana, los camiones que traen la materia prima ya vienen cargados con fardos de chatarra, que se vuelven a utilizar en sus productos. Es un ciclo de renovación que no se detiene y que ayuda a mantener el equilibrio ambiental de ambas empresas”, amplía la directora de Seta Embalagens, con sede en São Bento do Sul (Santa Catarina), Tânia Stela Zimmermann.
Al tiempo que explica que su misión como empresa es transformar el cartón en una solución, ya sea en embalaje o en política inversa, enviando los sobrantes (restos de cartón, pallets y plásticos) a sus proveedores.
Para ella también, la logística inversa es un instrumento de desarrollo social y económico con importancia fundamental en la educación social y financiera de los brasileños. Su práctica debe difundirse entre los niños, desde la edad preescolar, para que comprendan el significado del reciclaje para la existencia humana y la vida en su conjunto en el planeta.
“Hemos implementado ya, en nuestra unidad del Sur, y estamos iniciando en la unidad de Espírito Santo, la recogida de tapas de productos plásticos de los empleados, con el objetivo de que ellos también conciencien a sus familias sobre la separación de envases para su reciclaje”, explica Zimmermann.
“Estas tapas, al llegar a la empresa, se entregan en colegios de los barrios que las envían a empresas recicladoras. Con la venta pueden invertir en pequeñas mejoras. “El mundo gira y los productos también deben girar: ¿para qué dejar algo tirado si en la empresa adecuada se convierte en un producto nuevo? – señala la directora de Seta.
Valor aportado
Para los clientes de Paraibuna Embalagens, el ciclo virtuoso también se extiende y es valorado. Este es el caso de JP Micro Ondulados, con sede en el municipio de Boracéia, en el interior de São Paulo, que considera la logística inversa como un instrumento fundamental para regular la oferta de papel en su mercado.
“Encontramos en la empresa un socio fuerte y eficiente para implementar esta estrategia, ya que sus procesos son eficientes y seguros para producir productos de alta calidad que cumplan con los requisitos de nuestros clientes. Esta asociación resultó muy fructífera, sumando resultados a nuestro negocio”, dice Paulo Evandro Lucas, del área de Contraloría.
A su criterio, las principales ventajas son la reducción del uso de recursos naturales, la garantía de materia prima básica para la producción de bobinas de papel y la reducción de los costos de flete, basada en el uso racional del transporte, lo que combina entregas con recogidas de materiales. de logística inversa, actividad que la empresa está desarrollando desde el inicio de sus actividades. “Su evolución ha sido muy positiva”, puntualiza.
