Perspectivas 2024: ¿Cómo nos desafía el nuevo año?

Como en todo inicio de año, deseamos entender lo que nos espera en este nuevo período.  

A nivel empresarial, además,  el ejercicio de plantearse retos que motiven el trabajo diario es también una forma de anticipar escenarios  y las expectativas, vitales al operar con responsabilidad, resiliencia y en relación con múltiples clientes, aliados y  entornos particulares. 

Nos acercamos a varios líderes latinoamericanos de organizaciones vinculadas a la industria del papel y el cartón, y los empaques y embalajes para pedirles que  nos compartieran sus opiniones y visiones sobre los principales retos y perspectivas para 2024. 

Este fue el resultado y sus principales ideas compartidas. 

Michael M. D’Angelo, 
Presidente de The Independent Packaging Association (AICC USA)

‘’Es un buen momento para estar en la industria de los envases de papel”

La necesidad de reemplazar el plástico en la cadena de suministro de envases es cada vez más evidente. Los envases a base de papel ofrecen soluciones listas para usar y son el material de embalaje más reciclable y reutilizable del planeta.
 
Esto es una ventaja incomparable que los fabricantes deben usar a su favor, mientras los consumidores los exigen porque así lo valoran”. 

Desde esta perspectiva,  el mayor reto de los cartoneros en 2024 será poder capitalizar las oportunidades que un mercado exigente, como el actual, ya le reconoce y valora. 

Desde el punto de vista de nuevos negocios, el movimiento de reshoring/nearshoring es otra tendencia del mercado que favorece los envases a base de papel. 

La humilde caja marrón ha sido la solución elegida por las marcas para mover su producto hacia arriba y hacia abajo en la cadena de suministro y los mercados. 

El crecimiento del comercio electrónico, es imparable y da como resultados cifras que lo avalan.  En los resultados de los pasados  días de compras “Ciber 5” en los Estados Unidos, que mostraron un aumento de casi el 10% en las compras combinadas en tiendas y en línea, por un total de $38,1 mil millones, tres mil millones más que en 2022. 
 
Por último, la tecnología y la automatización ha llegado a las  plantas, haciendo que los convertidores sean mucho más eficientes y estén mejor preparados para enfrentar hábilmente los desafíos del mercado. 

Andrea Mora
Directora Ejecutiva de la Asociación de Corrugadores del Caribe, Centro y Suramérica (ACCCSA)

“La caja de cartón tiene ventajas innegables, pero también está siendo desafiada en su diseño, producción y circularidad”

Como industria, nos enfrentamos a la necesidad de crear empaques conectados a la vida de los consumidores y a la realidad de los mercados, las nuevas tecnologías y los retos sostenibles.

En esa línea, la caja de cartón como el alma de nuestra industria tiene ventajas innegables, pero también está siendo desafiada en su diseño, producción y la circularidad del negocio.

Hoy el diseño de empaques es cada vez más complejo y exigente, los procesos de personalización, de protección, de transporte y de comunicación exigen de los fabricantes investigación, innovación y actualización constante. 

Desde el punto de vista del proceso productivo, los desafíos más inmediatos tienen que ver con aumentos en la presión de costos (materia prima) y un claro rezago en la digitalización y automatización e inteligencia artificial  de procesos productivos, comparado con otras regiones del mundo.  

No obstante, esta situación lo cierto es que las proyecciones 2024, que realiza Numera Analytics para ACCCSA hablan de aumentos en la demanda de papel  y una normalización de este, por primera vez desde la pandemia. 

En materia de sostenibilidad y circularidad del negocio, el cartón es reconocido como el material para empaque con mayores ventajas. Es 100% reciclable y biodegradable y además es reutilizable. 

En la región se mantienen avances y mejoras constantes en el tema. Hoy por hoy, contamos con campos de producción de materia prima certificada, con plantas eficientes en consumo energético y con iniciativas para la reducción de materiales contaminantes en los empaques, como puede ser el plástico de un solo uso.

Pero necesitamos avanzar rápidamente en  aumentar y profesionalizar la recogida de material para reciclaje,  y de esta manera de oferta de fibras recicladas, también trabajar el desarrollo de nuevos materiales e insumos que favorezcan la reciclabilidad de las fibras. 

Pedro Hugo Alcalá
Director Ejecutivo de la Asociación Mexicana de Industriales del Cartón Corrugado (AMEXICCOR)

“La incertidumbre socioeconómica plantea riesgos de gobernabilidad democrática con efectos sobre el consumo”

Visualizo que se plantean desafíos importantes en 2024 para el sector de empaques latinoamericano, entre los que me parecen destacables al menos cinco: 
 
1. La constante búsqueda de alternativas para equilibrar la experiencia de usuario con el cuidado del ambiente
2. Un crecimiento económico moderado esperable para la región, según pronostican analistas. 
3.  Fenómenos climáticos cada vez más fuertes e impredecibles que generan cambios en dinámicas de consumo
4.  El componente político asociado al llamado súper ciclo electoral en América Latina, y 
5. El desarrollo y retención del capital humano.

Nuestra región el 2024 forma parte del llamado súper ciclo electoral que inició el 2021 en Ecuador, Perú, Nicaragua, Honduras y Chile; y continuará en el 2024 con El Salvador, Panamá, México, República Dominicana, Uruguay y Venezuela. Dicho ciclo tiene como antecesor votos de castigo en la región a los oficialismos, en ambientes de hiperpolarización y con altas dosis de populismo con creciente contaminación informativa. 

Lo anterior no favorece la certidumbre socioeconómica y plantea importantes riesgos de gobernabilidad democrática y con efectos en las dinámicas de consumo.

Puntualmente, en el caso Mexicano, diversos especialistas pronostican una desaceleración económica para el 2024 que trascenderá al 2025, como resultado del proceso electoral del próximo año.

El desarrollo del capital humano y retención del talento en las empresas mexicanas, lleva algunos años siendo un reto importante. En fechas recientes, el nearshoring (la relocalización global de cadenas productivas acercándose al consumidor final) representa sin lugar a dudas un estrés adicional al sistema, particularmente en personal técnico y de alta especialización. 

Si bien el nearshoring trae consigo nuevas empresas que requieren empaques y le inyectan dinamismo al sector y lo enriquecen en oportunidades de negocio, las empresas deberán ser cada vez más ágiles en la detección de oportunidades para invertir de manera inteligente en calidad, innovación y capital humano, de lo contrario, una mala lectura de las dinámicas económicas en un momento de incertidumbre puede traer terribles consecuencias para las empresas en sectores como el cartón corrugado.

Mariana Soto Arzúa
Gerente General de  CENEM: Centro de Envases y Embalajes de Chile. 

“Estamos siendo desafiados a buscar eficiencia y soluciones más sostenibles” 

Integrar la sostenibilidad en la estrategia empresarial de las fábricas no es una opción, sino más bien una obligación y es en esta línea que nuestros principales desafíos como industria y también como región se relacionan con las regulaciones ambientales, tales como la ley 20.920 ( de responsabilidad extendida del productor y fomento al reciclaje o ley REP), ley de plásticos de un solo uso y posibles nuevas regulaciones. 
 
Puntualmente, al hablar del caso de las industrias chilena, las empresas están abocadas casi en su totalidad a resolver temas de reciclabilidad mecánica de envases y embalajes, principalmente plásticos. 
 
Algunos de los temas que hoy se trabajan fuertemente son: desarrollo de nuevos materiales, con la incorporación de material reciclado en los envases, incorporación de nuevas barreras con barnices protectores, de aditivos que mejoren las propiedades de los materiales reciclados para facilitar su incorporación como materia prima, reducción de gramajes, uso de monomateriales para facilitar el reciclaje,  entre otros, son opciones que abren oportunidades nuevas en la industria.
 
Otro desafío inminente es la transformación digital y la automatización de los procesos productivos para que las empresas nacionales y regionales puedan ser cada vez más competitivas.