El embalaje juega un papel clave en la logística de exportación, especialmente cuando se trata de productos tecnológicos que requieren protección y eficiencia en el transporte. Con este desafío en mente, Van de Velde Packaging Unipap a.s. desarrolló Max for ECO, una solución de embalaje sostenible diseñada para la nueva versión de la impresora 3D Prusa con cubierta integrada.
El objetivo principal del proyecto fue crear un empaque que fuera completamente reciclable y, al mismo tiempo, ligero para reducir los costos de envío. Para lograrlo, la empresa eliminó materiales pesados y difíciles de reciclar, apostando por las propiedades estructurales del cartón corrugado. “Cada elemento del empaque fue optimizado para garantizar máxima protección con el menor impacto ambiental”, explican en el comunicado del producto.
El diseño reemplaza la tradicional tarima de madera por una fabricada con cartón moldeado tratado con barrera antihumedad, lo que mantiene la estabilidad sin comprometer la sustentabilidad. Además, las cintas de sujeción de PET fueron sustituidas por alternativas de papel kraft, lo que refuerza el compromiso con el uso de materiales reciclables.
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Para la fijación interna se utilizó espuma de polietileno expandido con un 30 % de material reciclado. Su resistencia a la compresión y vibraciones protege los componentes sensibles, evitando daños durante el traslado. También ofrece una ventaja adicional: su peso es menor al de otras opciones como las espumas reticuladas, lo que ayuda a cumplir con el objetivo de aligerar la carga sin sacrificar la seguridad del producto.
A nivel estructural, el diseño incorpora un detalle innovador: la parte superior del embalaje presenta un corte biselado que sigue la forma del producto. Este elemento no solo mejora la presentación visual, sino que también impide que se coloquen otras unidades encima durante el transporte, evitando daños por apilamiento indebido.
Con soluciones como Max for ECO, el cartón corrugado sigue demostrando su versatilidad en la industria del embalaje. Al reemplazar materiales tradicionales por opciones reciclables y optimizar el diseño para reducir costos y emisiones, este tipo de innovaciones marcan el camino hacia una logística más eficiente y sustentable.
